Por el piton derecho
Vicente Carrillo Cabecera
Entrevistas. Al Natural
Volver
«Siempre hay que mantenerse fiel a un estilo»

«Siempre hay que mantenerse fiel a un estilo»

El próximo 1 de abril Villaseca de la Sagra vivirá un día para la historia con la reunión de cinco mitos de la tauromaquia con el deseo de ayudar al niño Diego Ocaña del Cerro, aquejado de la enfermedad de Pompe. En la cuna de los novilleros no podían faltar los más jóvenes y además acompañados por la historia viva del toreo. Hoy hablamos con Alejandro Mora. Un joven valor placentino que nos cuenta la escuela de valores que vivió en casa con el gran Mirabeleño, su abuelo, y con su tío, el maestro Juan Mora. Alejandro crece en su toreo puro en un camino que ya ha vivido el sinsabor de las cornadas y la gloria del triunfo.
Jaime López

- Una afición que parte de la mano de tu abuelo

- Sí, desde chico en casa lo he mamado. Mi abuelo me metió «los perros en danza».

- ¿Cómo era?

- Un personaje, con una afición desmedida. Con mi abuelo tuve una relación muy estrecha. Veíamos los toros juntos. También con mi tío Juan, una afición que me inculcó desde pequeñito

- Además, valores…

- Sí, está claro. El temple, el respeto a la profesión y el distinguirse por algo. Era muy pequeño yo. Si me coge ahora lo hubiéramos vivido de otra manera. Las cosas que me decía se me quedaron, aprendí a torear por él. Vivía los toros con gran intensidad.

- ¿Llegó a verte?

- Yo le dije «abuelo, abuelo, quiero ser torero». Me puse delante de una becerra, me pegó un porrazo y se me pasaron un poco las ganas. Tras su muerte, en 2012, me volvieron las ganas y empecé, poco a poco.

- Hija, hermana y ahora madre de torero, su madre...

- Mi madre lo ha vivido. Es muy buena aficionada, tiene una afición muy grande y un amor a este mundo fuerte. Es complicado, su hermano es matador y ha vivido la dureza. Y ahora tu hijo…, no debe ser fácil. Normalmente va a la plaza a verme, cuando salen las cosas bien disfruta muchísimo. Cuando pasan las complicadas lo pasa mal.

- ¿Estuvo en la plaza cuando tu cornada fuerte?

- Sí, en las dos. Es duro ver a tu hijo sufriendo y cogido, pero bueno, siempre ha estado conmigo en lo bueno y en lo malo.

- ¿Qué te dijo tu tío cuando le dijiste que querías ser torero?

- No lo tomaba muy en serio. Fui empezando poco a poco, luego me apunté a la escuela y le pareció muy bien. Lo hemos ido llevando con naturalidad y sin prisas. Que vaya todo por su propio pie, despacito.

- ¿Por qué la Escuela de Salamanca?

- Por cercanía. Desde Plasencia me quedaba más cerca y al llegar aquí y conocer a los profesores y compañeros fue fenomenal.

- ¿Pesa el apellido?

- A mí, fíjate, no me ha llegado a pesar en ningún momento. Es un orgullo decir «mira el tío que tengo, tendré que superarlo». A mi no me ha pesado porque voy a la plaza y soy Alejandro Mora, no soy nadie. Soy yo mismo y salgo a demostrar cada tarde.

- ¿Existe pique entre vosotros?

- No sé si es pique, yo quiero ser mejor que él. Ojalá pudiera. Es ganas de querer ser cuando él ha sido. La ilusión de querer, querer y querer como dice Joselito.

- ¿Te sorprendió tu tío con Simón Casas?

- De primeras sí, no me lo esperaba. Luego sí, más de una vez hablando con él, ha pensado lo mismo. Tampoco me sorprendió mucho. Dije: «¡Qué valor de decirlo!». Yo tampoco estoy para hablar, él es quién es y se lo puede permitir.

- ¿Crees que te puede afectar?

- No sé. Cuando veamos la situación de entrar en una feria de Simón, veremos.

- ¿En qué os diferenciáis?

- Sigo muchos su pasos. Su naturalidad, el temple... ideas suyas. Me exijo mucho, me baso casi todo en su tauromaquia. Cada uno lo expresa diferente, no somos iguales. Se me ven cosas parecidas.

- Decía Fermín Rivera que es el camino más difícil...

- Fermín Rivera es buen torero. El camino de mi tío. Me fijo en los toreros de antes como Manzanares padre, Julio Robles, Curro Vázquez… Ese toreo que se echa en falta.

- ¿Cuesta más?

- Sí, a veces hay que salirse un poco del concepto para que pase algo. Toreas como te gusta y no llegas. De novillero hay que tirar de ganas de querer y que te vean las ganas de triunfo. Tengo la idea que tengo, siempre hay que mantenerse fiel a tu estilo.

- Hablemos de 2016. ¿En Talavera te pesó salir detrás de tu tío?

- En Talavera dije: «¡joder qué hago yo ahora!», pero luego te olvidas. Como estoy acostumbrado no me pesó tanto. De las ganas de querer, no salía todo tan fluido. De ese ansia de querer ser mejor que él es muy  difícil. ¡Le formó una a la vaca, macho…! !prepara cada una, la madre que le parió!

- En Villaseca no se vio tu mejor versión, ¿luces más con el novillo?

- Es para todos, las vacas son el entrenamiento En un bolsín es lo que hay. Ese día la vaca no me ayudó demasiado, lo intenté, faltaron cosas... No estuve de las mejores veces, lo reconozco. Todo me sirvió para aprender y dejé sensaciones

- Plasencia fue un paso adelante…

- Sobre todo con el segundo novillo. Al querer hacer todo en el primero, no salieron las cosas del todo bien. Con el segundo disfruté desde el capote, entrega total, espadazo y dos orejas. Esa tarde fue importantísima. Era la tercera o cuarta y las dos primeras no habían ido muy bien, eran las primeras después de la cornada. Plasencia fue un punto de inflexión.

- ¿En Ávila llegó tu mejor versión con pocos pases?

- Es mejor poco bueno que mucho y malo. El querer pegar más muletazos, ¿para qué? Intenta aprovechar los buenos. Hay veces que tienes que estar con más paciencia, va rompiendo, le cuesta más. Con la mano izquierda y el capote disfruté mucho, me encontré bien. Era la última que toreaba, estuve muy a gusto con la zurda. La derecha me cuesta más; con la izquierda tengo más facilidad aunque estoy entrenando la derecha también.

- ¿Cuándo llega el debut con caballos?

- No lo sé, ahora mismo no tenemos nada. Estamos pendientes de varias cosas, pero fechas cerradas ninguna. La idea es con caballos cuanto antes.

- Apoderados nuevos…

- Mostraron un interés muy grande y la idea que tienen es buenísima y lo que llevo con ellos estoy feliz, están involucrados. Con Jesús voy mucho al campo y entrenando, con Guillermo menos, que está en el despacho Es una relación muy buena.

- El del 1 de abril es un gran cartel, ¿verdad?

- Torear con esa gente… ¡buf!, son maestros. Cuando esté allí y los vea a mi lado me sentiré un privilegiado de compartir el tentadero con ellos. No deja de ser algo para mí, muy importante. Un pueblo tan chico y con tanta afición, es de admirar lo que se preocupan por la cantera. Organizan ese tentadero tan grande... fíjate para nosotros los chavales, ¡es algo muy grande!

Sigueme en Twitter Sígueme en Twitter @ALCOBENDAS82
Comparte y comenta esta noticia: