El novillero Pablo Aguado ha recibido el alta hospitalaria este lunes por la tarde y ha emprendido viaje hasta su casa, en Sevilla, para continuar allí con la recuperación de la fuerte voltereta sufrida el domingo en la plaza de toros de Las Ventas.

Unas horas antes del alta médica, el doctor Máximo García Padrós confirmaba la realización de un escáner cerebral «para descartar cualquier tipo de lesión» y también explicaba que la herida de la cabeza estaba bien.

El parte médico emitido por el equipo médico del coso madrileño rezaba que Pablo Aguado, durante la lidia del primer novillo de Fuente Ymbro, había sufrido un traumatismo craneoencefálico con pérdida de consciencia y una herida inciso contusa en la región parietal izquierda de 15 centímetros. Además de erosiones en la cara y en la boca. Intervenido en enfermería, se le trasladó en primera instancia al centro hospitalario San Francisco de Asís con pronóstico grave.