El consejero de Presidencia y Justicia y portavoz del Gobierno regional, Salvador Victoria, en calidad de presidente del Consejo de Asuntos Taurinos, ha descubierto en la mañana de este viernes el mosaico con el que la Comunidad de Madrid reconoce a la ganadería de Victoriano del Río como la más completa en presentación y bravura de la Feria de San Isidro 2013. En el acto ha estado acompañado, además de por el ganadero, por el director gerente del Centro de Asuntos Taurinos, Carlos Abella, miembros del Consejo de Administración y del Jurado calificador.

“Quiero felicitar a Victoriano del Rio por este importantísimo premio que reconoce a la mejor ganadería de la mejor feria del mundo. Desde que se instaurase en 1981, esta ganadería madrileña, cuyos toros pastan en la finca El Palomar de Guadalix de la Sierra, ha obtenido este reconocimiento en tres ocasiones ocupando un lugar destacado en los muros de uno de los espacios más emblemáticos de la plaza de toros de Las Ventas: el Patio de Arrastre”, explicó Victoria. La ganadería logró este premio en 2006 y 2007, desde que en 1981 se instaurase este galardón.

La corrida premiada fue lidiada el día 24 de mayo del pasado año por los diestros Sebastián Castella, José María Manzanares y Alejandro Talavante. Los dos primeros cortaron una oreja cada uno y el tercero las dos del tercer ejemplar, lo que le posibilitó salir a hombros por la Puerta Grande. El nombre de los astados y su peso fue el siguiente, por orden de lidia: Batatero (587 kg.), Buenasuerte (513 kg.), Artillero (517 kg.), Embarrado (528 kg.), Despreciado (600 kg.) y Comunero (590 kg.). Según el jurado calificador, la corrida estuvo bien presentada con seis toros cuyo promedio fue de 556 kilos, de agradables hechuras y comportamiento noble en la muleta para el lucimiento de los toreros.

Destacaron sobre todo tres, de los que dos, 2º y 4º, fueron aplaudidos en el arrastre. En general, cumplieron en la suerte de varas, embistiendo a los caballos con poderío y codicia, y ya en la muleta se mostraron colaboradores con los toreros y acudieron a los engaños con prontitud y fijeza.

Esta ganadería tiene procedencia actual Juan Pedro Domecq y Díez y sus antecedentes históricos se remontan a que por división de la ganadería de don Juan Guardiola Fantoni, que procedía de Gamero Cívico, uno de los lotes correspondió a su hijo don Manuel Guardiola Soto, el cual lo vendió en 1951 a don José Luis Vázquez Garcés, agregando vacas y sementales de Santa Coloma. En 1973 la adquieren los hermanos Vázquez Silva vendiéndola en 1982 a doña Leandra Díaz Martínez, que anuncia El Retamar. En 1985 la adquiere su actual propietario, que elimina todo lo anterior y la forma con un lote de don Juan Pedro Domecq, otro de don Luis Algarra junto con el semental Aldeano y setenta vacas y tres sementales de Jandilla. Posteriormente agrega más vacas de El Torreón y en 2002 compró por sorteo una octava parte de la ganadería de Toros de El Torero, todo de procedencia Juan Pedro Domecq.