Las Corridas Generales de Bilbao ya son oficiales. La plaza de toros bilbaína ha acogido el acto de presentación de los mismos con la presencia del presidente de la Comisión Taurina de la Junta Administrativa de Vista Alegre, Javier Aresti; los miembros de la Comisión, Juan Manuel Delgado y Antón Taramona; el empresario Pablo Chopera; la gerente del coso, Nerea Heppe; así como el autor del cartel anunciador, Javier Riaño Urieta. El ciclo vasco, que tendrá lugar del 22 al 30 de agosto, se compone de siete corridas de toros, una de rejones y una novillada. Las combinaciones son los siguientes:
EL APUNTE DE OPINIÓN. El aficionado los ha acogido con más decepción que ilusión. Esa es realidad. Y es una realidad con lógica y sentido. Las Corridas Generales dejan más sombras que luces, sobre todo, por la casi nula capacidad de sorprender ni de llamar la atención, sin salirse del guión repetido como un mantra en la amplia mayoría de plazas. En cuanto a toreros, faltan algunos de los triunfadores y que mejores sensaciones han dejado en el reciente San Isidro. En una feria como la bilbaína se esperaba la presencia de matadores como Eugenio de Mora, López Simón, Jiménez Fortes o Rafaelillo, la verdad. Más allá de los dobletes y alguna presencia que te deja con la boca abierta, se esperaba algo más en cuanto a los de luces. Por lo demás, todas las figuras y algún nombre ilusionante como Garrido, Morenito de Aranda o Urdiales. A nivel ganadero, la feria también hace aguas por la acuciante falta de diversidad.