Pintaban bastos otra vez. Otra tarde anodina, lineal e insustancial a merced del penoso encierro de Juan Manuel Criado, con toros desrazados, desclasados y sin ningún fondo. Otra tarde de sopor y aburrimiento, acrecentada si cabe por lo bochornoso que rodeó el día de ayer. Una lamentable Beneficencia. Pero bueno, eso, hoy, ya era harina de otro costal. Por suerte, el cuarto burel anunciado fue devuelto a los corrales, -indecorosamente presentado-, un anovillado que blandeó de salida, por lo que pudimos decir aquello de… ¡bendito sobrero! Uceda Leal, en una faena muy torera, le cortó una oreja y puso luz a una tarde que caminaba inexorablemente hacia el fracaso estrepitoso. Pero no nos adelantemos a los acontecimientos, vamos por partes.
Derrochó valor y entrega el mexicano Sergio Flores con el toro de su confirmación, pero poquito más, y es que casi no hubo tiempo. Casi sin haber transcurrido espacio después del brindis al público y en la segunda serie, llegó la primera cogida, de la que salió herido y ostensiblemente cojeando. Tuvo que abreviar e irse a por la de verdad, pues las molestias le impedían seguir con la lidia. La segunda cogida llegó al entrar a matar, ésta sin cornada, pero con una paliza de tres pares de narices. Se quedó a merced del toro, y afortunadamente no hubo que lamentar males mayores. El traje y el torero, hecho girones. Ojo, no solo vimos esto en el que abrió plaza, pues nos despertábamos de la siesta con el quite de Uceda, muy torero con el capote el de Usera, dejando una media realmente bella, de lo mejorcito de la tarde. Lo peor, se acababa de esta forma la confirmación de alternativa del torero de Tlaxcala.
No tomó vuelo la faena de Uceda Leal al segundo de la tarde, un Tímido que realmente hacia honor a su nombre. Muy justo de fuerzas y sin transmisión el de Juan Manuel Criado, que no generó ningún ánimo en los tendidos. Quiso llevarlo por abajo el madrileño, aprovechando la humillación del burel en tres tandas aseadas, pero su labor no caló en exceso, aunque el respetable le sacó a saludar.
Mal presentado, por feo y anovillado, el 4º del encierro, correctamente protestado e, igualmente, devuelto a los corrales. Bien Muñoz Infante, que aunque tardó algo en verlo, no fue reacio. Por cierto, se despide, cesado de forma inesperada. Creo que lo digo todo si digo que poco y mal se ha hablado de este asunto. Las razones de su jubilación y demás…, no sé, como que no termino de creérmelas. Él ya ha mostrado su sorpresa y su cabreo.
¡Por fin llegamos al oasis de la tarde! Saludó muy bien a la verónica Uceda Leal al 4º (bis), Costasol, el sobrero de Manolo González, para llevarlo embarcado en el percal hasta al caballo. Con el buen juego con la capa se empezaba a calentar la tarde, los tendidos y el torero madrileño. Entregado y humillando tomó la muleta del de Usera, yendo a más el toro, enclasado y encastado, regalando embestidas de triunfo grande por ambos pitones. Humilló, repitió y tuvo continuidad y recorrido. También se creció Uceda, aunque no terminó de corresponder, pues hay quien pensará, y con razón, que el toro era de dos orejas. Vaya usted a saber. Lo cierto es que Uceda le cortó una. Derrochó torería, dejó un cambio de mano sensacional, con despaciosidad, dos buenas series por el pitón derecho y un par de naturales templadísimos geniales. Culminó con una gran estocada, de las que acostumbra este torero, por lo que sobra decir que la oreja era merecida.
El feo, pero feo, feo sexto, Engalanado, que correspondía a Sergio Flores, pero que lidió Uceda, a punto estuvo de saltar al callejón en dos ocasiones. El trapío en el toro de lidia, rebajado a cotas ínfimas, pues el de Juan Manuel Criado debía haber pisado antes las calles de cualquier pueblo del Levante español que el ruedo de la plaza de toros de Las Ventas. Aquerenciado, desclasado y descompuesto, no dijo absolutamente nada, y el madrileño debió abreviar.
Fue ovacionado Curro Díaz en el primero de su lote, un toro pronto y que galopaba de salida, pero que se fue apagando como una vela más pronto que tarde. El torero de Linares dejó dos buenas series con la mano diestra, de toreo relajado y figura erguida, templando la buena embestida del burel de Juan Manuel Criado. Más deslucida y algo descompuesta por el izquierdo, por el que lo intentó Curro, pero cesó pronto en su empeño viendo que había poco que sacar. Y para entonces, el toro dijo hasta aquí. Metisaca en el primer intento, hundiendo la espada, pero imagínense ustedes donde fue a parar para que Curro no dudase ni un segundo en sacarla. Mejor el segundo intento. Intranscendental el quinto capítulo de la tarde, uno más protagonizado por los toros del hierro extremeño. Se le paraba a mitad de cada muletazo y no transmitía nada. Lo mejor, abreviar y pasaportar cuanto antes.
Parte médico de Sergio Flores: Herida por asta de toro en tercio inferior, cara interna del muslo derecho, con dos trayectorias, una hacia adentro y hacia arriba que causa destrozos en el músculo abductor y alcanza fémur. Otra trayectoria hacia fuera que alcanza la cara externa tercio inferior de 15 centímetros. Contusión de la articulación de la rodilla. Herida contusa en región superciliar derecha. Ligera conmoción cerebral y contusiones y erosiones múltiples. Pronóstico grave que le impide continuar la lidia. Intervenido bajo anestesia general. Trasladado a la Cínica la Fraternidad. Firmado Dr. García Padrós.
Sígueme en Twitter @LeoCortijo
