"Tenía claro que si tenía la oportunidad,  iba a volver a recortar a ese toro".

En la mañana de este domingo en Alfaro,  Jonathan Estébanez 'El Peta' se ha vuelto a ver las caras con el mismo toro que le hirió gravemente en Ágreda hace siete meses, por expreso deseo suyo. Pues desde febrero dejó el pedido hecho de que se quería volver a medir con él. Sin concurso de por medio y lejos de los grandes focos, ahí estaba el tío frente a frente con el astado que lo envió al hule, sin jugarse nada más que su propia vida. Sin ningún tipo de necesidad, con mucha vergüenza torera y pundonor se ha puesto con toda la verdad por delante enfrente de un astado imposible, que ha acortado el viaje y le ha lanzado por los aires en una feísima voltereta.

Su tobillo derecho, recientemente recuperado del percance de Valencia ha vuelto a resentirse, pero su gesta no hace otra cosa que incrementar su legado, sólo los genios tienen este tipo de necesidades que el resto de los mortales vemos como imposibles. No contento con ello, después de la voltereta ha vuelto a la cara del toro y, aunque le ha vuelto a tocar con el pitón, ha saldado, de una vez por todas, las cuentas con el colorado de Toropasión.

La historia de un toro complicado y un hombre con casta, coraje y verdad que forman ya parte de la leyenda del festejo popular. Hablamos con él y nos cuenta que, en principio, y a falta de más pruebas tiene un gravísimo esguince en el mismo tobillo fracturado en Valencia "mala pinta tiene", así que toca parar y volver a recuperar: "Cuando vas así a los sitios sabes que los toros te pueden coger porque los toros cogen y hacen daño, a veces tienes suerte y es menos y otras, como me está pasando últimamente, son lesiones fuertes y toca parar. Seguiremos al pie del cañón mientras nos deje la cabeza y el corazón" .