Ayer decíamos que se había creado un mal precedente en Tudela al poner otros toros distintos a los que se lidiaron por la tarde a correr el encierro. Pues bien, rectificar es de sabios, y hoy por sorpresa y pese que se había anunciado otra ganadería, tanto los astados de los Espartales como los de Núñez de Cuvillo han saltado al asfalto; hoy serán lidiados en corrida mixta por Diego Ventura, El Fandi y Sebastián Castella. Por cierto, mucho mejor presentados los Cuvillo de hoy que los del Pilar de ayer que no corrieron el encierro. ¡Qué cosas!
Algunos corredores se han enterado del cambio de ganadería 15 minutos antes del cohete, en especial los corredores de los primeros tramos, otros mozos se han pensado que era sólo un rumor. Además, supongo que de haberse anunciado este cambio, más de algún mozo que no ha acudido a la cita hubiera hecho acto de presencia. Pero, lo que sí que es raro es que el alcalde, que hoy ha hecho el reconocimiento del recorrido minutos antes del comienzo, no supiera nada de este cambio ni tampoco los cuerpos de seguridad ni protección civil. También es raro que haya corrido algún toro que en principio iba a ser sobrero esta tarde. Muy curioso todo.
Así que, sorpresa, y ¡qué sorpresa! ¡Qué encierro! Cuvillos sin hermanar con Los Espartales y sin cabestros, que hoy han vuelto ha desaparecer, han puesto a bailar rock a la gran cantidad de mozos y mozas que habían entrado en esta mañana de domingo en el recorrido. Peligro, emoción y toros sueltos. Pero, vayamos por partes.
Cohete puntual y hoy los morlacos no se han hecho esperar como ayer. Manada muy estirada de salida con los cuatro Cuvillos abriendo el camino, y de qué manera. Han chocado en la primera curva que se han encontrado, eso no les ha hecho perder ritmo ni peligro, buscaban a la nada antes de encontrarse con los mozos.
En la cuesta de la Estación un castaño de Cuvillo ha metido la directa y como una bala se ha distanciado del resto, subía buscando de lado a lado, mucho mérito por parte de los corredores en estos primeros compases; con ese primer tramo, un mozo navarro, habitual del encierro y de estas crónicas, ha aguantado muy bien al primero y se ha tenido que ir al vallado derecho para librar la embestida que le ha lanzado cruzándose desde el otro lado. Chapó.
Mientras, los cuatro morlacos que iban por detrás también subían liándola y lanzando embestidas a los mozos que muy bien le estaban aguantando, otra librada de otro mozo con un toro negro, que de la propia codicia que llevaba cuando ha lanzado la embestida se ha ido al suelo, quedándose a cerrar ese grupo. Por detrás, a distancia, venía la cabestrada mucho más lenta arropando a uno de Los Espartales.
Y así han llegado a Caritat, los toros de cabeza iban completamente sueltos y muy distanciados entre ellos, parecían avispas, uno por cada lado, lanzando derrotes con bravura, cruzándose y agitando la calle. Mucho mérito a los mozos que han aguantado allí, había que echar mucha casta y raza para aguantar por el centro de la calle; algunos mozos lo han hecho con los dos primeros toros, otros, entre ellos un mozo francés, han corrido lateralmente al tercero y el cuarto, consiguiendo colocarse en el centro casi en la curva y tomarla muy bien, aguantando perfecto; pero, sin duda, destacar el meritazo de la carrera de un veterano corredor pamplonés que ha aguantado en el centro de la calle delante del quinto que venía cruzándose sin parar, espectacular carrera marca de la casa a lo largo de toda la calle Caritat. Chapó.
Curiosamente los primeros toros han chocado contra el vallado ciego de la curva de Caritat con Almajares, pero no han perdido el liderazgo de la carrera, y tan apenas la distancia a pesar de que los dos últimos toros, de Los Espartales, no han chocado y han tomado la curva casi por el interior de forma muy limpia. Trote muy diferente entre los de procedencia Domecq con los de encaste Murube, esto ha condicionado también las distintas carreras que hemos visto. Por cierto, por aquí la bueyada ha pasado mucho después y prácticamente andando.
En Almajares ha continuado el rock and roll: varios mozos realizando buenísimas carreras a los dos primeros Cuvillos, pero brillantes un par de mozos que se han metido con tercero y cuarto, los cuales nada más tomar la curva se han cruzado al lado derecho buscando, a pesar de eso han tenido los arrestos de meterse ahí y aguantarles toda la calle. Chapó.
Y cuando pensábamos que al llegar a la Avenida Zaragoza la carrera se templaría, nos han callado la boca y hemos vuelto a ver rock del duro. Aquí ha pasado de todo, y, afortunadamente, no hay heridos por asta. Este tramo también tiene que ir por partes. Desarrollemos.
Nada más tomar la curva los dos primeros toros, el negro ha lanzado una embestida al lado izquierdo hacia un mozo que estaba cayéndose por ese lado, susto, además el toro parecía tener intención de volverse pues se había quedado medio girado embistiendo, pero no, ha continuado la carrera diligentemente en fila india detrás del castaño y aquí los mozos han podido lucirse a placer; primero tres mozos de blanco corriendo perfecto, a distancia, con elegancia, estos le han dado el relevo a un joven corredor navarro, que ha reducido distancias y se ha marcado un señor carrerón hasta la plaza, cogiendo la curva perfecta con los dos toros detrás; este mozo fue uno de los que cayó el primer día y fue pisoteado por toda la manada, con sus contusiones y su tobillo perjudicado ha brillado esta mañana. Chapó.
El tercero y el cuarto venían con los dos mozos delante de Almajares, justo antes de la curva se han metido varios mozos más, entre ellos una corredora navarra que venía disfrutando de una sensacional carrera cuando al llegar al comienzo de la Avenida Zaragoza otro mozo se ha retirado de la carrera cruzándose por delante y subiéndose al vallado, bloqueándole el paso. La moza ha caído al suelo de mala manera, lo cual le ha provocado un fuerte traumatismo, afortunadamente el castaño que en esos momentos llevaba detrás tan solo le ha rozado y no ha hecho por ella. Desde aquí desearle una pronta y rápida recuperación, la veremos pronto disfrutar en las calles delante de los astados.
Pero estos dos bureles todavía tenían mucho que decir, en especial el toro negro que iba limpiando el lado izquierdo de corredores. Al llegar a la mitad de la Avenida, dicho morlaco ha encunado a un mozo, llevándoselo en el aire durante muchos metros. Cuando el mozo ha caído al suelo, el toro también lo ha hecho, y al levantarse en lugar de seguir su carrera se ha vuelto a por el corredor que había quedado tendido en el suelo. Afortunadamente dos mozos han estado hábiles al quite y le han librado de un percance más serie. A pesar de eso, el corredor lleva una luxación de hombro y varios golpes, desde aquí le deseamos también una pronta y buena recuperación.
Mientras todo esto sucedía y ese toro se quedaba suelto y vuelto, en la bajada al callejón el resto de bureles seguían cruzándose de lado a lado, creando momentos de tensión y peligro. Han entrado en la plaza y tampoco querían entrar en toriles, incluso han reñido entre ellos. Mientras, en la calle, en Cuvillo que se había quedado suelto era perfectamente guiado por mozos hacia la plaza, los cuales han podido disfrutar de esta circunstancia que cada día es más excepcional.
Y, sin más, cuando este último toro ha entrado acompañado de los muy retrasados bueyes, el resto de toros han decidido entrar en los corrales. Encierro muy peligroso, emocionante, y con mucha bravura por parte de la astados u también por parte de los mozos. Hoy había que estar ahí.
Antes de despedirme, contaré algo de la tarde de ayer. Curioso que para la corrida de ayer hubiera dos carteles distintos, en uno se anunciaba a la ganadería El Pilar, en otro a los de El Parralejo. El orden de lidia señalaba que los toros eran de El Pilar, las divisas que se colocaron en la plaza fueron de El Parralejo y el hierro que llevaban marcados los toros terminó siendo de El Pilar. En Tudela pasan cosas raras.
Mañana más, suerte a todos.