Las restricciones derivadas de la lucha contra la epidemia de Covid-19 hacen imposible celebrar la feria taurina del Pilar 2020, más cuando el Gobierno de Aragón ha suspendido todas las fiestas patronales hasta el próximo 31 de diciembre.

En estas circunstancias, la Diputación de Zaragoza, propietaria de la plaza de toros de la capital aragonesa, ha decidido suspender para este año el contrato con la empresa que gestiona el coso de La Misericordia, la UTE formada por Tauroejea 2009 y Circuitos Taurinos.

El presidente de la institución, Juan Antonio Sánchez Quero, ha firmado un decreto en el que acuerda suspender «a todos los efectos» el contrato con la empresa adjudicataria al no poderse llevar a cabo las prestaciones contempladas en el mismo durante la Feria.

Esta decisión se suma a la que ya se tomó con la feria taurina de San Jorge, que tampoco pudo celebrarse en abril tras la declaración del estado de alarma a mediados de marzo.

Tanto la Diputación de Zaragoza como la empresa adjudicataria lamentan la actual situación de fuerza mayor y muestran su deseo y su compromiso de retomar la actividad de la plaza de toros de La Misericordia cuando la evolución de la epidemia de Covid-19 lo permita.