Los tres toreros toledanos abandonaron el coso a hombros tras estoquear una buena corrida de Alcurrucen a la que se le cortaron siete orejas . Destacaron el buen torero de Ángel Tellez y la entrega de Gómez del Pilar en su primer toro, según informa Pablo Ramos para Cultoro.

Eugenio de Mora, Gómez del Pilar y Ángel Téllez -en sustitución del herido Álvaro Alarcón- hacían el paseíllo, este 23 de marzo, en la plaza de toros de Toledo en la corrida a beneficio de la Fundación del Hospital de Parapléjicos de la ciudad.

Se lidiaban toros de Alcurrucén. El primero de la tarde un toro negro zaino apretado de carnes fue parado a la verónica por Eugenio de Mora vestido con un terno nazareno y oro. Mando de inicio Eugenio con la diestra en tandas cortas, dando aire al noble toro de Alcurrucén, tres tandas que hicieron sonar la música, con la mano izquierda los naturales fueron ligados y el toro mostró la misma dulzura que por pitón derecho. Buen nivel de Eugenio de Mora que dejo media estocada bien colocada que fue suficiente para hacer doblar al toro.

Al segundo de la tarde se fue a recibirlo Gómez del Pilar, vestido con un terno teja y azabache a la puerta de toriles, de rodillas en el tercio, lo que fue una declaración de intenciones de inicio. De rodillos lo toreo también de inicio con la muleta poniendo al público de acuerdo, la faena fue completa de intención poniendo más de su parte el matador que estuvo por encima de un toro que no estuvo repleto de fuerza y mostró poca trasmisión y toda la emoción la tuvo que poner Noe estando muy colocado con el toro y ligando los muletazos, con la mano izquierda los naturales tuvieron que llegar de uno en uno ya avanzada la faena. Termino la faena metido entre los pitones del toro de Alcurrucén. Estocada desprendida al primer encuentro que dejó al toro sin puntilla. Oreja.

El tercer toro de la tarde dio un susto a Ángel Téllez mientras lo ponía en suerte en el caballo, perdió los pies el torero y por fortuna estuvo hábil para realizarse el quite el mismo con su capote desde el suelo. Con torería y casta realizó el torero el quite por ajustadas y toreadas chicuelinas. Con la muleta la faena fue de menos a más, tomando sus notas más altas con la mano izquierda en las últimas tandas donde el torero obligó al toro con naturales largos y templados. La siguiente tanda con la diestra mantuvo el nivel de los anteriores naturales y aunque el toro en ocasiones se aburría y embestía a media altura la actitud de Téllez hizo que la faena no se viniera a menos. La última tanda de manoletinas hizo entrar totalmente al público en la faena y la estocada de perfecta ejecución que quedó un punto trasera obligó a Téllez a coger el descabello con acierto al primer intento. Dos orejas.

El cuarto de la tarde se llamó “Martinete” un toro largo y hondo de Alcurrucén que peso en báscula 617 kilos al que paro Eugenio de Mora y se le pegó al toro en el único puyazo que recibió. Se dobló de inicio con el toro, un toro bueno que rompió a embestir con clase y con el que de Mora estuvo a su altura, destacando los pases de pecho que fueron de pitón a rabo. Estocada arriba con la que el hondo toro no doblo y tuvo el torero que descabellar fallando en dos ocasiones y levantando el puntillero, lo que no imposibilitó que cortará otra oreja que le abría la puerta grande. Oreja.

Al quinto de la tarde lo paro Gómez del Pilar a la verónica metiendo bien la cara el toro en el capote, atisbando calidad el toro. En la muleta al toro le costó embestir, posiblemente por el exceso de kilos y tuvo Gómez del Pilar que ponerse muy de verdad para que el toro tomara los muletazos, exponiendo y dando tiempo al toro entre tanda y tanda. Se puso el toro difícil para cuadrarle para entrar a matar, pero esto no imposibilitó que Gómez de Pilar dejará una estocada arriba que le permito cortar oreja. Ya asegurando la triple puerta grande de los tres espadas. Oreja tras aviso.

Bravo en el caballo fue el sexto colorado que cerro plaza, empujando en el caballo, metiendo los riñones, y arrancándose de largo. En el quite que realizó Téllez el toro le tropezó con los cuartos traseros en el primer lance pegando con dureza el torero contra el suelo, se repuso el torero y se volvió a poner con el capote como si nada hubiera pasado. Con la muleta Téllez tras brindar al público fue metiendo poco a poco al toro en la misma, en otra faena de menos a más en la que el torero toledano trato al toro como si fuera bueno y le acabo convenciendo de como embestir. Mató de una excelente estocada en el sitio, aunque el toro no se echó y tuvo que usar el verduguillo fallando en varias ocasiones. Oreja.